El cliente siempre tiene la razón - Osa Lovely
SE ABRE LA ESCENA sobre la agente inmobiliaria Maureen que muestra a un posible comprador rico llamado John alrededor de una casa que está vendiendo. John menciona que está interesado en una habitación insonorizada, ya que le permitiría a su hijo tocar la batería. Maureen le muestra la habitación, pero se sorprende cuando la dejan sola en la habitación con la puerta aparentemente cerrada desde afuera. John finalmente abre la puerta y explica que debe haberla cerrado con llave por accidente y no pudo escuchar sus gritos.